Redacción Opción Yo
Miércoles 11 de junio de 2025
Aunque de seguro has escuchado sobre la ansiedad, como episodio o como trastorno, muchas veces no conocemos realmente de qué se trata, por eso a veces se hace tan difícil identificarla, así que lo primero que debemos hablar es sobre cómo saber si tienes ansiedad.
¿Qué es tener ansiedad?
Cada día más y más personas identifican síntomas de ansiedad en sus vidas, ya sean episodios aislados, o como una sensación constante; quizás tenga que ver con el estilo de vida tan acelerado que llevamos, con el estrés que enfrentamos cotidianamente, entre otras tantas posibles causas.
Podemos definir la ansiedad como un sistema complejo de respuestas afectivas, fisiológicas, psicológicas y conductuales, el cual se activa para anticipar acontecimientos, preparándonos para afrontarlos y detectar posibles peligros. El cuerpo y la mente están vigilantes para actuar en consecuencia.
La ansiedad es una respuesta natural ante situaciones de peligro real y tangible. En este sentido se puede calificar como un mecanismo de defensa. Sin embargo, cuando ese peligro no es real, sino más bien se manifiesta como una sensación, casi como un presentimiento, estamos en presencia de algo más complejo.
También es posible presentar episodios de ansiedad, pero si es un escenario constante, hablamos de un posible trastorno de ansiedad.
Tener ansiedad es como estar en una montaña rusa constante, puedes sentirte bien y de repente sentirte preso/a del miedo. Es estar a merced de ataques de pánico que pueden atacar sin razón aparente. Es como perder el control y estar al borde de un precipicio, sin poder retroceder.
Recuerda que este y otros tipos de trastornos emocionales deben ser identificados, clasificados y tratados por profesionales de la salud. Si te sientes identificado con lo aquí descrito, es crucial que busques apoyo profesional.
La ansiedad debe ser identificada y tratada por un especialista de la salud, sin embargo, es importante conocer sus síntomas más comunes.
- Nervios, tensión o agitación.
- Sensación de amenaza o peligro inminente.
- Ritmo cardíaco acelerado.
- Respiración acelerada.
- Cansancio injustificado.
- Sudoración injustificada.
- Temblores.
- Sensación de debilidad.
- Problemas de concentración.
- Pensar constantemente en la preocupación que nos agobia.
Comienza ya.
Hablar con alguien puede hacer la diferencia cuando la ansiedad se vuelve parte de tu día a día.
¡Contáctanos!¿Cómo trabajar la ansiedad?
Es importante reconocer que la ansiedad está compuesta por estas 3 partes:
- Emoción
- Conducta
- Pensamiento
Una manera de trabajarla es desglosando aquellas emociones, conductas y pensamientos; poniendo especial atención en las que sean de naturaleza negativa.
Los profesionales nos ayudan a hacer esta distinción, con esto ganamos más control y podemos lograr un mayor manejo de las emociones y actitudes.
Conclusión
Pedir ayuda no es algo malo, al contrario, es un paso muy valiente. A veces, solo necesitamos que alguien nos escuche y nos guíe para empezar a sentirnos mejor. No estás solo, y siempre hay maneras de volver a sentir paz y tranquilidad.
¡Es momento de decir YO!
Comienza hoy a vivir relaciones más sanas, una vida con sentido y un futuro alineado con lo que verdaderamente deseas.