Rosana Abavicius
Especialista en Coaching Internacional. Área de estudios: Psicología y Ciencias del Comportamiento.
Jueves 18 de marzo de 2021
Todos tenemos problemas, de alguna manera u otra, y la terapia es el principal aliado para poder identificarlos, entenderlos y superarlos. Los seres humanos somos una compleja red de emociones y pensamientos, constantemente estamos cambiando, reaccionando y accionando, por eso debemos contar con apoyo personalizado y profesional, a la hora de enfrentar nuestros problemas.
¿Por qué es importante hacer terapia?
Hacer terapia es fundamental para entender nuestras emociones y poder manejarlas. Aunque aún existen muchos prejuicios, y algunas personas piensan que realizar terapia es para personas con problemas mentales, la verdad es que todos necesitamos terapia, de alguna forma u otra, y más si nos enfrentamos a algún problema particular.
Una de las ventajas principales de realizar terapia es que te ayuda a enfrentar tus problemas y resolverlos de manera positiva, ya que te ofrece herramientas que te enseñan a evaluar todas las situaciones desde distintas perspectivas, te fortalece para que te afecten menos y te asiste para que puedas adaptarte, dándole a cada situación la importancia que merece.
¿Cuáles son los beneficios de hacer terapia?
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Es un espacio confidencial y seguro.
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Te permite expresarte libremente, colocar tus pensamientos en orden y te hace sentir comprendido.
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Podrás conocerte mejor.
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Te ayuda a relacionarte mejor contigo mismo, lo cual desencadena mejoras en la relación con otros.
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Te ofrece herramientas para resolver de manera positiva tus conflictos.
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Cambia tu actitud ante la vida.
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Te ayuda a modificar aquellas creencias que resulten limitantes para tu desarrollo.
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Podrás conocer tus emociones con mayor profundidad y entender sus orígenes.
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Te ayudará a vivir de manera plena, disminuyendo el estrés, la ansiedad y la depresión.
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Te proporciona bienestar y salud emocional.
Hacer terapia con un psicólogo no te hace una persona débil, todo lo contrario, al reconocer tu vulnerabilidad y trabajar en ella, te conviertes en una persona emocionalmente fuerte, que enfrenta los conflictos de la vida con accionar resolutivo, vive de manera consciente, plena y feliz.
Todos necesitamos apoyo terapéutico en algún momento, y propiciarlo de manera regular nos prepara mejor para enfrentar la vida, ya que la terapia sí funciona y siempre conducirá a resultados positivos.
Ir terapia te permitirá dominar tus emociones, por más oscuro que sea el horizonte ante ti, no tienes por qué luchar solo, el apoyo profesional es fundamental para transformar toda situación en un aprendizaje y poder dominar tus emociones.
El horizonte puede volver a brillar.
¿Cómo me ayuda la terapia para enfrentar los conflictos que se me presentan?
Los conflictos y problemas son totalmente normales en la vida de cada persona, aunque pueden variar en intensidad, siempre es importante contar con apoyo profesional para poder resolverlos de manera positiva.
Nunca se deben subestimar los problemas, todo lo contrario, se deben buscar resoluciones y contar con un espacio seguro, como el que te ofrece la terapia, para expresarte libremente y encontrar soluciones.
Existen tres caminos para la resolución de conflictos.
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El camino del poder.
Se refiere a las capacidades que tiene cada persona para lograr sus objetivos a través del accionar de alguien más. El poder no es intrínsecamente negativo, pero si se emplea para abusar de otros, evidentemente se vuelve una fuerza tóxica.
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El camino del derecho.
Contempla el sistema de normas que regulan los comportamientos de los individuos. Este sistema señala ciertas conductas como prohibidas y asigna castigos para cualquiera que infrija las normas e incurra en esas conductas prohibidas. Estamos hablando, por supuesto, de la ley y el sistema judicial, quienes resulven los conflictos dentro de este sistema.
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El camino del interés.
Esta metodología busca mediar entre las partes involucradas en el conflicto para encontrar una solución que las satisfaga por igual. Cada parte debe colaborar para propiciar la resolución, basándose en sus intereses particulares.
Cuando los conflictos incluyen distintas partes, la idea es transformar el debate en diálogo.
¿Cuáles son las ventajas del diálogo?
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El diálogo busca que las partes trabajen en conjunto, es colaborativo.
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Su objetivo es alcanzar acuerdos que satisfaga a todas las partes.
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Fomenta la reflexión.
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Ayuda a crear un interés auténtico hacia la otra persona.
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Crea una actitud positiva.
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Amplia el pensamiento.
¿Cómo nos ayuda la terapia?
Enfrentar problemas y conflictos es una situación intrínsecamente estresante que activa toda clase de reacciones emocionales, por lo cual necesita ser evaluada para valorar todo lo que implica, cuáles serían las dificultades y sus consecuencias.
En las sesiones de terapia, el profesional se enfoca en las particularidades de cada caso para poder encontrar caminos resolutivos, ya que cada situación, cada persona y cada problema es distinto.
De esta manera es posible identificar los recursos que cada uno tiene para resolver problemas, es decir, las habilidades de cada quien, desarrollarlas y potenciarlas.
Para resolver cualquier problema debemos actuar de forma racional, ideando planes de acción y realizar tareas, que nos guíen a soluciones prácticas y reales.
Debemos evitar los pensamientos rumiantes, que sólo nos hace ahondar en las preocupaciones. En vez de concentrarnos en el problema, hay que concentrarse en buscar soluciones.
Siempre hay una solución.
Cuando nos enfrentamos a un problema, hay dos vías para considerar.
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La vía positiva.
Cuando nos enfocamos en crear una orientación positiva, partimos desde la idea de que todo problema tiene solución, esto requiere una visión positiva ante la vida y una actitud constructiva, ya que se entiende a los problemas como desafíos, como obstáculos que se pueden resolver.
Siempre es posible modificar nuestro sistema de creencias para propiciar la autoconfianza y mejorar la actitud positiva. En terapia podemos trabajar estos aspectos, así como desarrollar la autodeterminación, ya que es el motor principal para accionar de manera positiva.
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La vía negativa.
En esta vía los problemas son considerados amenazas y la posibilidad de resolverlos genera expectativas negativas. En este caso la persona está sumida en dudas e inseguridades, y no cree en su propia capacidad para resolverlos, y propicia respuestas emocionales como estrés, depresión, ansiedad, frustraciones, e incluso, malestares físicos.
En estos casos la terapia es vital, ya que funcionaría como un bote salvavidas yendo hacia nuestros rescate, para salvarnos de hundirnos en el mar de la desesperación, para luego ayudarnos a crear herramientas y llevarnos hacia tierra, donde se abren las vías positivas para resolver nuestros problemas.
¿Qué herramientas nos ofrece la terapia para enfrentar mis problemas?
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Identificar claramente cual es el problema.
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No escapar al miedo se sentir malestar, enfrentarlo, los problemas son retos.
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Siempre con actitud y pensamiento positivo.
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No nos hace daño “el problema” sino la idea que tenemos acerca de ese problema.
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Reconocer que todo se puede cambiar, si hay un verdadero deseo de lograrlo
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Aprender a hacernos buenas preguntas. No ¿“por que me pasa a mi”?, sino, “para que me pasa esto?, que tengo que aprender.
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Interpretar el problema como una oportunidad de cambio y mejora.
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Utilizar herramientas que ya me han sido efectivas en otras oportunidades. A mi o a personas que quiero o admiro.
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Buscar en el entorno, próximo o lejano, quién me puede apoyar.
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Caerse esta permitido, pero levantarse es obligatorio
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No perdamos la perspectiva de que todo pasa.
Es posible modificar nuestra actitud ante la vida y manejarnos de forma positiva, sólo necesitamos encontrar el apoyo que necesitamos.