¿Por qué las organizaciones buscan un psicólogo especialista para sus procesos de selección?

Gracias a la experiencia, la sensibilidad y la formación profesional, los psicólogos podemos identificar en una entrevista de selección laboral, rasgos de personalidad que facilitan o limitan su adaptación al nuevo entorno de trabajo, lo cual ofrece panoramas bastante acertados sobre si una persona será adecuada o no para el puesto.

¿Qué es un headhunter?

No es una respuesta que sea tan simple de responder. Lo hablo por lo aprendido a través de mi experiencia durante los años que llevo en esta linda labor y profesión. 

Para entender qué es un headhunter, o un especialista de selección, debemos buscar el contexto a través de la historia, así podemos conocer su verdadero propósito y ampliar la visión de esta labor tan importante.

Hace un par de décadas, nuestros clientes intentaban conseguir un profesional adecuado para llevar a cabo un rol importante en su empresa, pero al final se encontraban desperdiciando tiempo y recursos, sin lograr su cometido, lo cual les producía frustración y desesperanza.

La idea principal es que podamos brindar el apoyo necesario para desarrollar una metodología de búsqueda, evaluación y selección, de las personas que optan por un puesto en una empresa, de esta manera nos encargamos del proceso de principio a fin, para identificar a aquellos que sean los mejores candidatos para las empresas. 

Estoy convencida que no hay malos candidatos, solo que no se facilita su incorporación en una cultura acorde a sus competencias, motivaciones y valores. Por ello considero, que debemos tratar de pensar a través de la perspectiva de ellos, para entender su ideal de organización a la que quisieran y se sintieran cómodos laborando. De esta manera podremos llevar a nuestros clientes, tanto internos (candidatos) como externos (organizaciones) a un punto de confort mutuo tanto del proceso de selección, como de su vínculo laboral naciente. 

Este último año hemos experimentado cambios en muchos aspectos, y muchos han visto afectada su vida laboral, sin embargo no tiene que significar el final, sino todo lo contrario, puede ser una oportunidad para cambiar perspectivas, quizás el teletrabajo pueda ayudar a evitar la insatisfacción laboral. 

A través del coaching podrás accionar tus habilidades y alcanzar los objetivos que te has propuesto, no solo laborales, sino personales también. Los procesos de selección laboral dicen mucho sobre nuestras capacidades pero no son determinantes. 

Un coach te puede ofrecer apoyo personal y profesional para lograr tus objetivos.

¿Qué papel juega la terapia en el proceso de selección laboral?

Y pasa muy frecuente, recuerdo hace un año, en plena pandemia, cuando uno de mis clientes me pidió que la persona debía tener un sin fin de características. Y no me refiero solamente a competencias técnicas de conocimiento y de experiencia, sino de habilidades blandas. Yo, con mucha sutileza, lo llevé a que pensara un poco en qué cosas realmente eran negociables y cuáles no. Adicionalmente le pedí que me contara un poco las opciones que le podía ofrecer a las personas para llevarlas a interesarse en su organización. Bueno, mi cliente un tanto optimista, esperaba encontrar una persona que fuera tolerante a la frustración, adaptable al cambio, trabajara bajo presión y tuviera toda la disposición al trabajo sin importar horarios. Pero a cambio, consideraba que era suficiente ofrecerle un contrato de trabajo y un salario, que por demás no era el más competitivo del mercado. Bajo estas condiciones, no me quedó más remedio que tratar de llevar a mi cliente a que bajara su expectativa de características para las personas que esperaba entrevistar dentro del proceso de selección.

Como era de esperarse, no tenía mil opciones para presentarle, ya que cuando entrevistaba a cada persona, veía a través de ellas, que no iban a hacer match con la organización, y que, por el contrario, en un corto tiempo íbamos a tener una deserción pronosticada. Al finalizar el ejercicio y en vista de tantas personas entrevistadas, mi cliente cedió en alguna de sus expectativas en la selección y entendió que no podía pedir una máquina, y, por el contrario, al tener una persona eficiente trabajando en su organización, podía darse él mismo y darle a la persona, un horario de trabajo digno para que se pudiera desarrollar integralmente y además motivarse a seguir laborando dentro de su organización.

Obviamente esta labor, en mi caso, realizada por un psicólogo, facilitó en mi cliente, un grado de conciencia mayor, ya que, con argumentación tanto de la realidad de las personas, como de mejora de condiciones ambientales, haría que las personas se comprometieran desde la emocionalidad con su lugar de trabajo y no buscaran mirar hacia ningún lado. 

Y es que la misión de ser psicólogo al servicio de un proceso de selección, va más allá de la respuesta al cliente. También me pasa frecuentemente, que, sin querer, hacemos intervención en crisis en personas que siendo honesta, no tienen un proyecto de vida claro.  Y menciono un caso en particular que me sucedió hace menos de un mes. Mientras yo iba explorando las expectativas de un candidato dentro de su entrevista a profundidad, su argumentación frente a lo que quería en el aquí y en el ahora para su vida, sin él darse cuenta, y sólo a través de mis preguntas, se confrontó frente a lo que realmente quería. Ilustro mejor el caso para ponerlos en contexto: Hace tres meses dejó a su esposa, también colombiana, en Canadá. Llevaban viviendo 3 años allá por traslado de trabajo de su pareja. Pero mi candidato empezó a sentirse frustrado al no encontrar un oficio o trabajo en el que se sintiera bien y su frustración lo llevó a devolverse a su país para poder ejercer su profesión y sentirse bien con él mismo.

Pero luego de hablar por más de 40 minutos de sus motivaciones, proyecto de vida y situación familiar, llegó a la conclusión que no se siente feliz aquí sin su pareja y que por tanto no continuaría en el proceso de selección, porque desertaría en el corto tiempo para volver a vivir en Canadá. Sé que, en ese momento, tuve que tomar una decisión más centrada en el bienestar de la persona, que en mi proceso de selección. Un camino más ético centrado en mi deber como profesional en psicología y orientarlo hacia lo evidente e inconsciente por parte de él y que decidiera a consciencia sobre su verdadera motivación en la vida.

Con todo esto que menciono lo que quiero decir es que hemos tenido que reinventarnos para ampliar nuestra visión y alcanzar un proceso exitoso en el que la relación entre cliente, cultura y persona, no se vea afectada, sino enriquecida.

Y es que nuestra labor va más allá de cumplir satisfactoriamente con la entrega del proceso de selección. El proceso de adaptación de la persona a la empresa u organización, y viceversa, es otro momento crítico para nosotros. 

No lo menciono en términos de acuerdos de servicios, sino más desde una visión de responsabilidad profesional y social, ya que las personas que resultan seleccionadas podrán gozar de un trabajo permanente y podrán salir de su zona de confort. Hay mucha presión porque hay muchos factores en juego.

Con esto realmente quiero exaltar el verdadero rol del psicólogo dentro del proceso de selección y el por qué cada vez somos más requeridos en este quehacer. 

La labor de un especialista de procesos de selección debe ir más allá de su buena voluntdad e intenciones altruistas, porque esto más bien puede afectar el proceso de selección. Es crucial producir un espacio de crecimiento para las empresas y organizaciones, ya que lo importante es identificar las mejores características, según el perfil requerido. 

Para los candidatos también resulta enriquecedor ya que les podemos ofrecer retroalimentación sobre su perfil, características, y capacidades, también podemos ayudarlos en su proceso de búsqueda. 

Por esto nuestro rol como profesionales de psicología dentro de un proceso crítico de selección dentro de una organización, nunca se puede perder. Nos convertimos en asesores en una relación de doble vía, en donde siempre debemos buscar ganar – ganar. Ganan las organizaciones al seleccionar de nuestra mano, una persona motivada y alineada con los valores y el ambiente laboral y gana la persona al ingresar a una organización que esté alineada con sus motivaciones, intereses y proyecto de vida.

El coaching puede ofrecer grandes alternativas para conocernos a nosotros mismos, romper las barreras que nos detienen y cumplir las metas que nos hemos trazado, y en especial el coaching laboral, nos ayuda a valorar nuestro talento.

Todos tenemos habilidades positivas, por eso es crucial identificarlas y trabajarlas, para llevarlas al máximo de sus capacidades y alcanzar nuestro propio bienestar.