Mary Carmen Oliveira, Yael Goldman, Danara Cavalleri, Rosángela Di Geronimo, Marisa Inés Labanca, Adriana Quiroga
Sábado 2 de abril de 2022
Desde que en la entrega de los premios Oscar ocurriera un desencuentro entre el actor Will Smith y el comediante Chris Rock, se ha disparado la controversia sobre temas fundamentales como la violencia en la comedia o el manejo de emociones. ¿Quieres conocer las reflexiones de nuestros profesionales?
¿Dónde comienza la violencia?
La ceremonia de los premios Oscar es una de las noches más esperadas del año y la más importante de toda la industria cinematográfica. Esperamos con ansias ver los vestidos y conocer a los ganadores de las categorías más codiciadas.
Sin embargo, lo más probable es que olvidemos los hitos históricos ocurridos esa noche porque de lo único que se ha hablado es sobre el desencuentro entre Chris Rock y Will Smith.
En reacción a una broma hiriente sobre la condición de alopecia de Jada Pinkett Smith, Will subió al escenario y abofeteó al comediante Chris Rock.
¿Estuvo bien o mal? Por supuesto, la controversia ha sido astronómica y se han tocado muchos temas, por eso te queríamos compartir las reflexiones de nuestros especialistas.
La coach Yael Goldman señala:
“Me pareció relevante un comentario de Piers Morgan que en 2011 Will Smith le dijo durante una entrevista en su casa: no molestes a mi esposa. No te gustaría verme cuando estoy enojado. ¿Un tratamiento no efectivo de la ira, o una ausencia de manejo de las emociones? Y de Franchella, un actor argentino que comentó que si se hubiese acercado y lo hubiese mirado fijamente a Chris Rock hubiese sido más efectivo que la violencia ejercida.”
La profesional Danara Cavalleri comenta al respecto:
“Creo que hay dos temas importantes a tratar:
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Si es aceptable el uso de la burla en todo, si la libertad permite que tengamos que aceptar las burlas en cuanto a las heridas más importantes de nuestro cuerpo, como pueden ser enfermedades físicas o mentales, o si hay un límite al que no se debe traspasar.
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Cómo debemos actuar ante esto, pues la regulación y canalización adecuada de las emociones es definitivamente el tema aquí, pues cómo expresamos nuestro rechazo a estos actos que también pueden ser agresiones, con agresión o con respeto. El cinismo del rechazo a la violencia con más violencia o siendo capaces de responder de una forma ejemplar. Creo que solo hablar del acto agresivo nos dejaría cortos ante el incidente.
Otra cosa es de quién ejerce la violencia, se ve claramente cómo la sociedad permite la violencia de determinados medios mientras de otros no, porque hay quienes justifican la reacción de él por ser quien es, mientras que si hubiese sido otra persona no hubiesen permitido que permaneciera allí. Creo que definitivamente hay muchas vías de trabajo, pero la violencia y el machismo, como la respuesta ante este, es lo que se debería trabajar.”
Estamos expuestos a la violencia y muchas veces ni siquiera nos damos cuenta de ello pero responder con más violencia no parece ser lo más adecuado, ni siquiera justificándola con la protección o el amor.
Debemos aceptar que hay emociones que necesitan ser reguladas y para ello precisamos el apoyo de los profesionales en el área.
La profesional Rosángela Di Geronimo concluye:
“Este suceso de los Oscar puede enseñarnos cómo estamos siempre vulnerables a la violencia, cosa que obviamente es inexcusable. Lamentablemente, estar expuesto a la violencia es algo que no podemos cambiar pero sí regular.
¿Cómo hacemos eso?
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Poniendo límites saludables
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Utilizando la comunicación asertiva cuando haya violencia verbal.
La situación de los Oscar, como pasó, es un claro ejemplo de que la violencia sólo crea más violencia.
Invito a que hagan un ejercicio e imaginen cómo se hubiese visto Chris Rock si en vez de pegarle, Will hubiese expresado el dolor que le causaba la enfermedad de su esposa y cómo afectan esos comentarios de burla ¿de qué se hablaría ahora si eso hubiese sucedido?”
Regular nuestras emociones es fundamental pues si no lo hacemos de manera saludable, podemos encontrarnos afectados de manera emocional e incluso física.
Es lamentable que toda la controversia manche la posibilidad de reflexionar sobre la comedia a costa del sufrimiento de otros y que la lucha de Jada haya quedado olvidada.
Más allá de la controversia que se ha generado, es importante apreciar el espacio para estas reflexiones porque al final de cuentas, todos estamos aprendiendo y tratando de ser mejores personas.
Por eso debemos seguir cuestionandonos e invertir en lo más importante: nuestra salud mental y nuestro crecimiento personal.
¿Controlamos nuestras emociones o ellas nos controlan a nosotras?
Parece tácito y quizás hasta irrelevante, pero aprender a regular nuestras emociones es fundamental para cada aspecto de nuestras vidas, y quizás algo de esto hizo falta en el controversial momento de los Oscar donde Will Smith abofeteó a Chris Rock.
La profesional de OpciónYO, Marisa Inés Labanca, nos comenta al respecto:
“Lo que más leí, además de cuestiones relativas a la inteligencia emocional, fueron comentarios que aseguraban que Will Smith es un machista porque pasó por encima de Jada Pinkett y reaccionó en su lugar. En verdad creo que el chiste de Rock estuvo fuera de lugar, y no solo se puede pensar desde la ofensa a la mujer sino también desde la cuestión de la burla al diferente, en este caso la diferencia es una enfermedad.
Desde mi óptica, el desubicado es Rock, sin embargo todos hablan de Will, entiendo que hablamos desde la perspectiva de la regulación de las emociones pero también debemos pensar en las emociones que pudo haber tenido Jada: ¿Vergüenza? ¿Temor? ¿Miedo al ridículo? No lo sabemos.
¿Qué tal si Smith salió en defensa de un ser amado y por ello no pudo tamizar sus actos con el razonamiento para poder reaccionar de manera distinta? ¿Quizás no pudo poner en palabras lo que sentía y actuó como lo hizo porque sabe cuánto le afectó a su mujer ese comentario? ¿O lo único que podemos pensar es que cosificó a su esposa y actuó por ella?”
Adriana Quiroga, otra de nuestras profesionales, nos comparte su reflexión desde un punto de vista distinto:
“Es respetable, sin embargo, lo que sucedió pues permite visualizar a un Will humano, herido, desregulado emocionalmente, haciéndolo real y de carne y hueso; que también se equivoca y que de una forma admirable reconoció su error y pidió disculpas creíbles de corazón. También se vale reconocer el equivocarse porque somos perfectamente imperfectos y nos aterriza para entender que por más dinero, estudio o posición, todos en algún momento podemos necesitar ayuda y es necesario alzar la mano.”
La profesional Mary Carmen Oliveira, agrega:
“Además, ¿Qué significa para él esa enfermedad? ¿Cómo habrá vivido ese padecimiento de su esposa? ¿Cuánto se habrá cargado de compromiso y responsabilidad? A mí me parece, lejos de justificarlo, como a la reacción que asume un animal en recuperación de una herida”.
Es saludable reflexionar alrededor de la acción de Chris Rock y la reacción que tuvo Will Smith, partiendo desde el punto de que la violencia sólo genera más violencia pero también entendiendo que somos humanos, susceptibles a mejorar, propensos a equivocarnos pero muy valorable en el caso de reconocer nuestros errores y trabajar para mejorar.
La vida es un constante movimiento y a veces necesitamos apoyo para entender qué está ocurriendo y poder adaptarnos de la mejor manera posible. La posibilidad de invertir en tu salud mental y en tu crecimiento personal, está al alcance de tu mano.